Richard Ortiz, de 39 años, pasa su resaca en la cárcel. Después de ‘pegarse la borrachera’ llegó a su casa en Ambato y quería solamente golpear. Primero intentó con sus dos hijos: de 17 y 12 años de edad, pero los adolescentes lograron correr y encerrarse en sus habitaciones para evitar las agresiones del progenitor….