Los puntos de vacunación habilitados para la aplicación de las segundas dosis contra el coronavirus en Quito pasaron de 24 a 28, en algunos de los cuales hubo gran afluencia de personas y otros sitios, que habían anunciado su reapertura, no lo hicieron.
Esto, tras la suspensión por cinco días en la aplicación de la segunda inyección de Sinovac, en algunos puntos, por un retraso en la llegada del medicamento.
Su aplicación se suspendió entre el miércoles 11 y el domingo 15 de agosto.
Una vez que llegaron 2 millones de dosis, el pasado sábado, se retomó su aplicación este lunes, pero con una reprogramación tomando en cuenta la fecha de la primera dosis.
De esta forma, el lunes 16 de agosto debieron vacunarse quienes no accedieron a su segunda dosis de Sinovac, el miércoles 11 de agosto; el martes 17 de agosto, los del jueves 12 de agosto; el miércoles 18 de agosto, los del viernes 13 de agosto; el jueves 19 de agosto, los del 14 de agosto; el viernes 20 de agosto, los del domingo 15 de agosto.
Pero también fueron convocados quienes habían sido vacunados con Pfizer y Sinovac, el 19 de julio y los de AstraZeneca, el 24 de mayo.
Cronograma de vacunación para Sinovac segundas dosis entre el 16 al 20 de agosto
En el norte de la capital de la República hubo 12 puntos de vacunación; en el sur y valles, 14; y en el centro, 2.
En el Centro de Convenciones Bicentenario, al norte, hay un promedio de vacunación entre 5.000 a 7.500 personas con 33 brigadas. Hubo alta demanda y personas que llegaron en horas de la madrugada con ropa abrigada para soportar el frío.
Más al norte, en el sector de Calderón, hubo reportes de filas extensas de personas a la espera de la vacuna. En la Universidad Central, en el centro, personas consultadas mencionaron que avanzaron pronto.
En el colegio Benalcázar personas que fueron a vacunarse esperaron alrededor de una hora y media como Alejandro Leiva, de 36 años. Él recibió Pfizer. Dayana Morales, de 24 años, aprovechó que llegó a Quito a realizar algunas diligencias y se inmunizó con Sinovac. En Ibarra, en donde vive, aseguró que hay mucha complicación.

Fuente: El Universo, 1er Impacto